Fue en Portbou 22 de octubre de 2018 – Publicado en: Reseña
«Interesante libro que trata de rastrear en las últimas horas del pensador germano…aquel tenaz “buscador de perlas”, que dijese Hannah Arendt, y “trapero” que cual rey Midas convertía en oro los desechos que hallaba en su impenitente búsqueda»
«Álex Chico ( Plasencia, 1980) cogió su cuaderno de notas y pertrechado de las lecturas acumuladas partió hacia la localidad gerundense con el fin de conocer el escenario del fin del pensador germano, y tratar de hurgar en el lugar del fin con el pretendido objetivo de hallar más pistas acerca del trágico final . Se ve, no obstante, que el bagaje del escritor , por lo que apuntan ciertas derivas hacia otros lugares y personajes, ib bien surtido.
Como digo, y él lo cuenta en su « Un final para Benjamin Walter» ( Candaya, 2018) se dirigió a la localidad mediterránea y no es que el pueblo transformase el propósito de su viaje pero sí que le hizo poner el foco de manera destacada en el pasado, el presente en declive del pueblo, y las causas de tal situación en la que , acuerdos europeos mediando, convirtieron a Portbou y a otros localidades vecinas como Cerbère, al norte, en pueblos encerrados en sí mismos, casi como localidades fantasmales, las aduanas desaparecidas, y dejadas a la buena de dios, la estación que ya, según señala el escritor – y reafirma la guía del lugar, Teresa-, desde el mismo trazado no parecía estar pensado con demasiado tino ( casi podríamos decir las estaciones refiriéndonos al caso similar de la población del norte nombrada), ahora con un tráfico no ya escaso sino , digamos que , escaso en llegadas salidas y destinos; a este aislamiento acompaña el deterioro de los establecimientos que vivían como complementarios a la llegada de los trenes…»